Carta de los presos políticos en Tlacolula

11 de enero de 2007
DE LOS PRESOS POLÍTICOS DE TLACOLULA

Tlacolula, Oaxaca, México, 05/01/07

Al pueblo de Oaxaca.
Al gobierno del estado.
A las camaras de Diputados y Senadores.
Al presidente de la república Mexicana, Felipe Calderón Hinojosa.
A la comunidad internacional.

Los abajo firmantes, a través de este medio nos dirigimos a ustedes para manifestarles lo siguiente:

A raíz de los sucesos acontecidos en la ciudad de Oaxaca los días 20 y 25 de noviembre y 1º de diciembre, fuimos aprendidos en forma arbitraria y con extrema violencia por miembros de las corporaciones policíacas federales (PFP) y del estado (policía ministerial), así como por personas vestidas de civil a bordo de vehículos sin placas. Desde el primer momento de nuestra detención no fueron respetadas nuestras garantías individuales que nos otorga la constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

El día 25 de noviembre antes de ser trasladados a este reclusorio a algunos de nosotros se nos vendó los ojos con “masquin”, fuimos torturados con toques eléctricos en diversas partes del cuerpo, mientras éramos interrogados y se nos amenazaba que nos iban a ejecutar.

El día 27 de noviembre fuimos trasladados al CEFERESO Nº 4 de Tepic, Nayarit en donde estuvimos presos por 23 días. En este penal de alta seguridad se nos dio un trato desde el traslado, ingreso y estancia como si fuéramos los delincuentes más peligrosos. Durante todos estos días nos mantuvieron encerrados en una celda de 2×2 m, incomunicados y sin salir al sol.

A partir del 20 de diciembre, como resultado de las gestiones de nuestros familiares y la presión social local, nacional e internacional fuimos trasladados nuevamente a este reclusorio de Tlacolula, Oaxaca, en donde actualmente seguimos recluidos16 presos políticos, a quienes el gobierno del estado de Oaxaca nos acusa de diversos delitos como lo son: robo y secuestro, sedición, asociación delictuosa y daños en propiedad ajena. Estas acusaciones se basan en las partes informativas de los cuerpos policíacos federal y estatal, las cuales no han podido ser sustentadas legalmente y por lo tanto no son procedentes ante la ley.

Por los motivos arriba mencionados reiteramos nuestra inocencia y exigimos nuestra libertad incondicional e inmediata, así como el respeto de nuestras garantías individuales y nuestra integridad física y emocional.

Por un Estado de Derecho con paz y justicia social.

ATENTAMENTE

Juan Carlos Luis Mendoza

Cornelio López Sánchez

Abraham Reyes Herrera

Uriel Julio Méndez Hernández

Rosein García Guzmán

Manuel Ventura Santiago

Alejandro Luna López

Edgar Alejandro Molina Cuevas

Flaviano Juárez Hernandez

Pedro Garivo Pérez

Alberto Alejandro Correa Orozco

Felipe Sánchez Rodríguez

Armando García Salas

Arturo Reyes García

Gilberto Toledo de los Santos

Marco Antonio Aquino Silva